La importancia de juego.
El
juego es una actividad fundamental en la
infancia y el juguete es la principal herramienta para los juegos y por eso es
importante saber elegir el juguete apropiado para cada niño y edad. Los adultos
somos los mejores compañeros de juego en los primeros años de vida de nuestros
hijos e hijas. Nuestro papel es tan importante en esta fase que, si no
realizáramos esta actividad con el niño, su desarrollo no avanzaría a un ritmo
adecuado. Hemos de tener en cuenta también que el juego no tiene como única
función entretener al niño, sino cumplir un papel muy importante en su
desarrollo físico, psicológico, intelectual, emocional, social y cultural, facilitándole
el aprendizaje de situaciones individuales y sociales.
Juegos y juguetes apropiados
para cada edad:
- De cero a un año: Los bebés entran
en contacto con el mundo viendo, oliendo, probando y tocando. Les gusta
ser cogidos en brazos y acunados, que les hablen y les canten. Les encanta
escuchar música y jugar al escondite (cucús – tras). En esta etapa predomina
el juego motor que supone movimientos del propio niño como golpear,
agitar, girar, cambiar objetos de mano, etc. Algunos juguetes apropiados
para esta edad son los multisensoriales (que intervengan varios sentidos,
juguetes sonoros, luminosos, brillantes,…), móviles (que puedan
colgarse sobre la cuna), juguetes
de caucho, plástico o goma para poder morder y manipular, libros con
dibujos, pelotas, etc. Los padres y madres son los mejores compañeros de
juego para esta edad.
- De uno a tres años: Comienza la
exploración del mundo que tienen alrededor. El niño empieza a andar y
hablar, capacidades muy importantes
para el desarrollo de su
inteligencia. Pero sigue siendo muy importante el movimiento y la
exploración del entorno (tocar, romper, arrastrar, empujar, sacar,…). Algunos juguetes indicados
para esta edad son los de arrastrar y empujar (correpasillos y
triciclos), dar cuerda, recipientes
para meter y sacar cosas ( juegos de cocina y alimentos de plástico o madera), pelotas, palas,
cubo, rastrillo, piezas grandes para construcciones, libros y rompecabezas
de piezas grandes, hojas de papel,
etc. Comienza en esta etapa el interés por el juego simbólico, para
ello son recomendables juguetes que imitan objetos cotidianos: utensilios
de cocina, comiditas, animales,
- De tres a cinco
años: Predominan los juegos de “roles” (jugar
a los médicos, a las mamás, a los maestros, etc.) Les gusta que jueguen con
ellos al aire libre, en los columpios, en la pila de arena o simplemente dar un
paseo. Podéis leer o mirar con ellos libros de cuentos con dibujos, hablar y cantar juntos. Deja además que tu
hijo o hija te ayude en las tareas del
hogar. Algunos de los juguetes apropiados para los niños de esta edad son:
libros y rompecabezas, pelotas o
balones, palas y baldes, muñecas con sus accesorios, juegos de cocina, ropas
para disfrazarse y, en general, objetos que imiten actividades de la vida
diaria. También son muy útiles materiales con plastilina, pintura de dedos,
lápices de colores, construcciones, rompecabezas y puzzles, mecanos, juegos de
precisión, ensartar cuentas, juegos de chinchetas de colores, etc.
- A partir de seis
años: En esta edad comienza a surgir el juego
de reglas donde tienen un papel importante los otros niños, hermanos y adultos
como modelo. Van aprendiendo desde las reglas más sencillas a otras más
complejas. Como hemos comentado que en
los niños de un año el principal juguete era la persona adulta, en los de esta
edad son los compañeros, ya que cumplen un papel socializador. Los juegos
apropiados en esta edad son los colectivos y que conlleven actividad física:
escondite, policías y ladrones, comba, deportes, etc. Empiezan a gustarle los
juegos de mesa colectivos: cartas, dominós, parchís, damas, etc. Habla con tus hijos
sobre sus intereses y preocupaciones y ayúdalo con sus tareas. Para divertiros
elegir algo que podáis aprender juntos. No deben abandonarse los juguetes de
etapas anteriores que siguen siendo válidos a lo largo de toda la niñez. La
lectura, si ha sido fomentada convenientemente ocupa una parte de su tiempo de
ocio.
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